sábado, 23 de abril de 2011

Diario de una narcoléptica I

No más “narcoléptica de clóset” como me llamó un amigo una vez. Mis conocidos más cercanos saben que dormir ha sido una de mis características desde… ¿preparatoria? Pues bueno, ahora sé que es por una razón y la verdad es que explica muchas cosas, por ejemplo:
·         Cantar mientras duermo (raro, sí).
·         Dormir en todos lados a todas horas.
·         Dejar la puerta de la casa abierta por las mañanas (no sé si sea realmente gracias a la narcolepsia o por mi excesiva distracción).
·         Pues dormir ¿no?
·         Y otras cosas que no sé exactamente cómo explicar o no recuerdo.
Decidí ir con una especialista cuando me di cuenta de cuándo comenzará a trabajar existiría la posibilidad de quedarme dormida… Y no citemos las demás consecuencias que eso podría ocasionar. ¡Ah! Y también varias veces que amigas me recomendaban que fuera con un doctor, aunque nunca les hice mucho caso.
En un principio me dijeron que probablemente tuviera hipersomnia, es decir, somnolencia excesiva durante el día. Pero para diagnosticar exactamente qué tenía y qué se podía hacer al respecto, tuve que quedarme casi veinticuatro horas en la clínica. Durmiendo toda la noche con miles de cables conectados a mi cabeza, cara, cuello…  En realidad no fueron tan estorbosos, dormí profundamente. Al día siguiente tuve que hacer siestas cada hora y media o dos horas, no recuerdo bien. En todas me quede dormida en menos de cinco minutos. Fue un día cansado, a pesar de estar durmiendo; además, el olor a medicamento que tenía el lugar se me quedo grabado. Todo ese tiempo estuvo conmigo una enfermera especializada de quien ya no recuerdo bien su nombre en la que encontré cosas en común conmigo, por ejemplo, le encantan los libros de fantasía y  Glee.
Ese día juraba una y otra vez que no tendría nada, sólo habría gastado dinero y tiempo. Y mucho champú, eso gracias al pegamento que se quedo en mi cabeza por los cables que me pusieron, duré años quitándomelo.
 Una semana después me entregaron los resultados, muchas hojas de números, graficas y blablablá. Y pues no era hipersomnia lo que tenía, sino narcolepsia, supongo que no es tan grave porque no me caigo dormida a cada momento. Acabo de empezar a tomar medicamento por las mañanas “Modiodal” y ya veré qué tal me funciona, como en dos semanas iré con mi doctora.

¡Ah! Y por increíble que parezca, casi nadie ha logrado tomarme fotos mientras duermo



2 comentarios:

  1. Aaaaw mi vida.. cómo te quiero!!Pero tránquila, no pasa nada... Cuando te quedes dormida manejando y tu cabeza oprima el claxon hasta que la persona que esté en el auto de atras tenga que bajarse a ver qué pasa o cuando te quedes dormida surtiendo la lista del supermercado.... yo iré a salavarte...como siempre..... te quiero otaku...hhhhemhem..putaku..hemhem...perdón, perdón, otaku..

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  2. yo te amo preciosa... si estas despierta(que no creo) ve mi blog

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